Destino. Cuántas veces negué la existencia de tal argumento...Cuántas veces dije que no existía...Así también como la perfección...Ironía.iQue ironía la mía! Creo que faltaban los años, y después de tantos - o quizás no tantos - preguntarme si todos aquellos conceptos podrían tener base en mi realidad...
Pensar que mil veces me crucé con aquello que me haría cuestionar la realidad de todo aquello que parecía demasiado perfecto para mi vida...
No, no fue la muerte...más bien el muerto...el muerto más vivo...
Amor. Otro concepto que me era imposible describir, fundamentar una definición...escuchaba...escuchaba... y seguía escuchando, me lo imaginaba, pero era demasiado fantasioso...asombrarme frente a las personas que decían: " me enamoré" y sonreían, todo el día, cada vez que se acordaban de sus amores. Pensar que era todo "cosa de la cabeza de la gente", que eso no existía, que era estúpido... Y ver gente de la mano...o abrazarse...o besarse, y no sentir nada...
iJá! Y ahora, como un payaso que salta y grita, sonrío y hablo como si todo lo que parecía idiota, siempre lo hubiera creído acertado...
iQue torpe!, iQue ingenua! Pensar que nunca me pasaría... Creer que mi corazón fuera piedra y de hierro mi carne...Pensar...Suponer...
Maldito destino, tú, que no existes... Sos un maldito... Cayendo en tus trampas, indefensa, ¿cómo saber que no podría escapar? Mi curiosidad, ansias de aventura me llamaban, gritaban, berraban cada vez que un "tal vez" se oía...
Y fui...Fui confiada de poder escapar cuando quisiera, como otras tantas cosas que he dejado sin terminar.
Y el muerto resucitó, él, el que negaba, el que nunca me alcanzaría... Resucitó, me abrazó, me apretó, y nada... Nada... Treinta veces nada... Hasta que caí, no tenía salida, dos contra uno es cobardía...
Y luego tres... Tres contra uno... Tres y yo...
Y así desvanecí en sus palabras... En sus acordes... El calor era más fuerte... No había piedra dentro de mi, ni hierro eran mis carnes... iOh descubrimiento fantástico!, podía sentir...
Tres contra uno... Amor, destino y muerto, más vivo y rojo que nunca... Amor...
Lo siento, lo juro, es la única explicación a todo esto: Amor y Destino ( y él, sí, el muerto), pero aún así, no consigo definir... ¿qué es amor?, ¿Es una sensación?¿un color?¿un gusto?
Desfilo entre grandes pensadores, atiendo a su filosofía, pero no lo entiendo...¿por qué?¿cómo? Lo sientes, sabes que está, sabes que es él, todo, sabes todo... Y no lo puedes explicar, intenta...iVamos!, ¿qué es el amor?
Quizás no sea... Tal vez... ¿quién sabe?
Y vuelvo a preguntar...¿sabes?,¿me explicas qué es del destino?, ¿es?...¿no es?¿qué es?
Lo pienso... También lo pienso... Y cuestiono su definición religiosa... ¿Por qué religión está ligada con destino? ¿No es destino, por acaso, el aparecer de alguien no esperado?¿El sobrevivir de una mariposa más allá de su ciclo de vida? El picar de una serpiente... Las respuestas que son sonrisas, las miradas que se entregan, las que apartan... Las manos que se encuentran en un roce sin querer, cuerpos avergonzados...gritos, lamentos por aquellos que no fue...( o que fue, ¿quién sabe?)
Solo entiendo, que cada vez entiendo menos, que me imagino otro mundo, otra gente....pero siempre aparecen el amor, y el destino... Es irrevocable...
0
Opiniones